La estatua Cristo Redentor está situada a 709 metros sobre el nivel del mar, en la ciudad de Río de Janeiro, Brasil, específicamente en la cima del cerro del Corcovado. Tiene una altura total de 38 metros, incluidos sus 8 metros de pedestal. Fue inaugurado el 12 de octubre de 1931, después de aproximadamente cinco años de obras.
La idea de un monumento religioso en Río fue sugerido por primera vez en 1859, por el padre Pedro Maria Boss y la Princesa Isabel. Se retomó la idea en 1921, cuando se aproximaba la conmemoración por el centenario de la Independencia. La primera piedra de la estatua fue colocada el 4 de abril de 1922 y las obras fueron iniciadas en 1926. Entre otras personas que colaboraron para la realización pueden ser citados los ingenieros Heitor da Silva Costa (autor del proyecto), el artista plástico Carlos Oswald (autor del diseño inicial del monumento) y el escultor francés Paul Landowski (ejecutor de la cabeza y las manos de la escultura).
El proyecto escogido era inicialmente estaba pensado como un Jesucristo con una cruz en la mano derecha y el mundo en la mano izquierda.
El diseño más realista dio paso a otro más simbólico a petición del cardenal brasileño Sebastiao Leme, quien deseaba que se pudiera ver su carácter religioso desde cualquier distancia.
La paternidad del Cristo ha sido motivo de controversia, aunque Bel Noronha, biznieta de Silva Costa, autora de un documental sobre el monumento y comisaria de la exposición, sostiene que es totalmente brasileño, puesto que el proyecto fue creado, construido y financiado por brasileños.
“Hay una creencia de que el Cristo fue donado por Francia o creado allí, que pudo surgir porque se construyó en una época en que la cultura francesa tenía un fuerte peso en Brasil y porque algunos establecen paralelismos con la Estatua de la Libertad explicó en entrevista con Efe”.
La construcción de hormigón armado, de más de 1000 toneladas, combina ingeniería, arquitectura y escultura, y tiene entre sus logros el hecho de que nadie muriera en accidente durante las obras, algo que no era normal en la época y con proyectos de esa dimensión. Por las condiciones de construcción, sobre una base en la que casi no cabía el andamio, con fuertes vientos, y la estructura de la estatua, cuyos brazos se extienden hacia el vacío y la cabeza queda inclinada en un desafío a la ingeniería.
En la ceremonia de inauguración, el 12 de octubre de 1931, estaba previsto que la iluminación del monumento fuera accionada desde la ciudad italiana de Nápoles, donde el científico italiano Guillermo Marconi emitiría una señal eléctrica que sería retransmitida por una antena situada en el barrio carioca de Jacarepaguá, vía una estación receptora localizada en Dorchester, Inglaterra. Sin embargo, el mal tiempo imposibilitó la hazaña y la iluminación fue finalmente accionada directamente desde el local.
El sistema de iluminación fue sustituido dos veces: en 1932 y en 2000. Restaurado en 1980, con motivo de la visita del papa Juan Pablo II, y nuevamente en 1990. En 2003 fue inaugurado un sistema de escaleras mecánicas para facilitar el acceso a la plataforma donde se eleva el Conocido como símbolo no solo de la ciudad de Río de Janeiro, sino también de Brasil, la estatua Cristo Redentor es captada por las lentes de dos millones de turistas que contemplan y trasforman este punto .